Santiago y sus alrededores
La capital en el Pleistoceno
Los gonfoterios, caballos y muchos otros mamíferos fósiles llegaron por primera vez a Sudamérica tras el evento conocido como "Gran Intercambio Biótico Americano", en donde, debido a la formación del istmo de Panamá, múltiples especies norteamericanas ingresaron al sur y viceversa, permitiendo que diferentes familias de animales se extendieran hasta las zonas más recónditas del continente como Chile. La Región Metropolitana, hoy en día llena de suburbios y edificaciones, fue alguna vez el hogar de muchas de estas criaturas, denominadas como Megafauna, las que acabaron desapareciendo hace unos 10,000 años aproximadamente debido a cambios climáticos y a la intervención del hombre, sin embargo, aún siguen apareciendo los restos que atestiguan su presencia en un Santiago muy diferente al que conocemos.
Una de las zonas con más descubrimientos de gonfoterios registrados en Chile es la Región Metropolitana, donde se han llevado a cabo diferentes hallazgos de estas criaturas, muchos de los cuales se han efectuado por mera casualidad por ciudadanos chilenos y empresas en medio de obras de construcción. La especie más abundante, tanto en el país como específicamente en Santiago, corresponde a Cuvieronius hyodon, un gonfotérido de casi tres metros de alto muy similar a los elefantes modernos, aunque su cráneo era mucho más bajo y alargado. Se ha confirmado la presencia de esta especie en localidades como Chacabuco, la Compañía Minera El Roble y Melipilla, perteneciendo todos al Pleistoceno Superior (Frassinetti y Alberdi, 2001; Frassinetti y Alberdi, 2000).
Otra especie identificada, aunque con un poco más de polémica, es Notiomastodon platensis, datado para el Pleistoceno Superior y encontrado en lugares como el Parque Natural Aguas de Ramón (comuna de La Reina), Chacabuco, Batuco (Emol, 2007; Labarca, 2016; Frassinetti y Alberdi, 2005) y en la comuna de Padre Hurtado (El Trebal), este último representa el cráneo más completo hallado en Chile y fue encontrado durante la construcción de una planta de procesamiento de la compañía Aguas Andinas (Cooperativa, 2011; Soto, 2011; MNHN, 2013). Notiomastodon se caracterizaba por sus enormes colmillos curvados hacia arriba que, junto a su altura de casi tres metros y su peso de 4 toneladas, le daban una apariencia bastante imponente (Labarca, 2015). Otros miembros de la familia Gomphotheriidae han sido hallados en la región Metropolitana, pero estos no cuentan con una clasificación más específica debido a que son vestigios muy fragmentarios, este material óseo proviene de lugares como Malloco (comuna de Peñaflor), Melipilla, Cerrillos y San Bernardo (Frassinetti y Alberdi, 2001; Labarca, 2016).
Los famosos perezosos gigantes sudamericanos también caminaron alguna vez por Santiago, destacando la colosal especie Megatherium medinae, hallada en Las Pozas (Chacabuco) y reportada por primera vez en 1974 por Frassinetti y Azcárate (Labarca, 2015; Tamayo y Frassinetti, 1980). A diferencia de sus parientes más grandes, como Megatherium americanum, M. medinae poseía un tamaño un tanto más mediano, aunque igualmente enorme (Lopéz et al., 2018). Otros miembros del género han sido reportados para las localidades de Conchalí, en donde se encontró un ejemplar referenciado como Megatherium sp., y Lo Hermida, de donde provienen otros restos pertenecientes a M. medinae (Frassinetti y Alberdi, 2001).
De la misma forma hay presencia de la subfamilia Scelidotheriinae, también de gran tamaño, de estos ha destacado bastante un individuo del género Scelidodon (cuyos restos fueron asignados a la especie Scelidodon tarijense en 1968 por Casamiquela) hallado por un trabajador de la fábrica de cementos "Princesa" en Conchalí, en los suburbios de Santiago (Labarca, 2015; Castillo, 2018; Casamiquela, 1967). Otros fósiles de un posible Scelidotheriinae han sido reportados en San Bernardo (Labarca, 2015).
De Las Pozas (Chacabuco) se conoce también a la especie Macrauchenia patachonica, un enorme litopterno que poseía una pequeña probóscide (trompa) semejante a los tapires actuales y que se extendió por gran parte de Sudamérica, llegando incluso hasta la Cueva del Milodón en Magallanes, siendo una de las especies endémicas de esta parte del mundo (Frassinetti y Alberdi, 2001; Labarca, 2015).
En cuanto a équidos prehistóricos, se conoce en la Región Metropolitana a la especie Hippidion saldiasi, un pequeño caballo del tamaño de un burro moderno hallado en las localidades de Chacabuco, Santa Rosa de Chena y Cerrillos, aunque existen restos de otro Hippidion indeterminado proveniente de Chacabuco que podría tener afinidad con la especie H. principale (Labarca, 2015; Frassinetti y Alberdi, 2001). Otro género más grande registrado es Equus (Amerhippus), reportado para Chacabuco, Conchalí, Colina, Punta de Rieles y San Bernardo (Frassinetti y Alberdi, 2001). Sumado a lo anterior, se conocen materiales hallados durante obras de la empresa Metro S.A. en el sitio denominado CT N°2 que han podido asignarse a Equidae gen. et sp. indet. (López et al., 2020). Tras la extinción de estos caballos, los équidos no volverían a pisar Santiago hasta la llegada de las primeras expediciones españolas a este lugar en la época de la conquista (Arita, 2010).
La presencia de ciervos también se encuentra reportada, aunque únicamente para la localidad de Pudahuel y con una antigüedad mayor a la que poseen los fósiles de Megafauna que suelen encontrarse generalmente en Santiago, pues estos restos poseen 150.000 años aproximadamente y corresponden a la especie Antifer ultra, un cérvido de gran tamaño y enormes astas que habitó diferentes partes del país (Labarca, 2015).
En la Provincia de Chacabuco y en el Parque Natural Aguas de Ramón se han hallado así mismo restos óseos del género Palaeolama, un camélido extinto de gran tamaño (de unos dos metros de altura y casi una tonelada de peso) (López et al., 2005; Emol, 2007). Otro reporta señala también la presencia de un camélido de gran tamaño en la localidad de Pique Vivaceta, hallado durante obras de la empresa Metro S.A., sin embargo, sus materiales sólo han podido asignarse a Camelidae indet. por el momento (López et al., 2020).
Hasta el momento el único carnívoro del Pleistoceno Superior reportado en Santiago es un Canidae indet. hallado en la localidad de Chacabuco, aunque no se ha podido determinar una identificación más específica para el mismo (Canto et al., 2010; Ortuya et al., 2018).
Ortuya et al. (2018) describieron el primer material óseo de un roedor fósil hallado en Santiago, se trata de un pequeño diente asignado a Ctenomyidae gen. et sp. indet. que fue hallado en Pique Plaza Egaña durante la construcción de la línea 3 de Metro, aunque su edad aún no ha sido revelada. Por otro lado, se han reportado también fósiles de animales modernos como Lama guanicoe, que habita hoy en día la Patagonia, e Hippocamelus bisulcus, ambos de la Hacienda Chacabuco (Frassinetti y Alberdi, 2001; Labarca, 2015).
Referencias:
Frassinetti, D. y Alberdi, M. (2001). Los macromamíferos continentales del Pleistoceno superior de Chile: reseña histórica, localidades, restos fósiles, especies y dataciones conocidas. Estudios Geológicos, vol. 57, pp. 53-69. (https://biblioteca.sernageomin.cl/opac/DataFiles/EG_57_n1_2_p_53_69.pdf)
Frassinetti, D. y Alberdi, M. (2000). REVISION y ESTUDIO DE LOS RESTOS FOSILES DE MASTODONTES DE CHILE (GOMPHOTHERIIDAE): CUVIERONIUS HYODON, PLEISTOCENO SUPERIOR. Estudios Geológicos, vol. 56, pp. 197-208. DOI: https://doi.org/10.3989/egeol.00563-4151
Frassinetti, D. y Alberdi, M. (2005). PRESENCIA DEL GÉNERO STEGOMASTODON ENTRE LOS RESTOS FÓSILES DE MASTODONTES DE CHILE (GOMPHOTHERIIDAE), PLEISTOCENO SUPERIOR. Estudios Geológicos, vol. 61, pp. 101-107. (https://www.researchgate.net/publication/26580500_Presencia_del_genero_Stegomastodon_entre_los_restos_fosiles_de_mastodontes_de_Chile_Gomphotheriidae_Pleistoceno_superior)
Emol (2007). Encuentran restos de mastodonte de 15 mil años de antigüedad en Santiago. Recuperado de: https://www.emol.com/noticias/nacional/2007/08/24/273163/encuentran-restos-de-mastodonte-de-15-mil-anos-de-antiguedad-en-santiago.html
Cooperativa (2011). Hallazgo de cráneo de mastodonte en Padre Hurtado comenzará fase de análisis. Recuperado de: https://www.cooperativa.cl/noticias/sociedad/ciencia/paleontologia/hallazgo-de-craneo-de-mastodonte-en-padre-hurtado-comenzara-fase-de/2011-05-19/102023.html
Soto, S. (2011). Hallan el primer cráneo completo de mastodonte en Chile. Recuperado de: https://elmoderador.wordpress.com/2011/03/24/hallan-el-primer-craneo-completo-de-mastodonte-en-chile/
MNHN (2013). Gonfoterios: Del imaginario a la ciencia. Recuperado de: https://issuu.com/mnhn_cl/docs/folleto_gonfoterios_mnhn_2013_2014
Labarca, R., Alberdi, M., Prado, J.,Mansilla, P. y Mourgues, F. (2016). Nuevas evidencias acerca de la presencia de Stegomastodon platensis Ameghino, 1888, Proboscidea: Gomphotheriidae, en el Pleistoceno tardío de Chile central. Estudios Geológicos, vol. 72 (N°1), pp. 1-13. (https://www.researchgate.net/publication/301480790_Nuevas_evidencias_acerca_de_la_presencia_de_Stegomastodon_platensisStegomastodon_platensis_Ameghino_1888_Proboscidea_Gomphotheriidae_en_el_Pleistoceno_tardio_de_Chile_central)
Labarca, R. (2015). LA MESO Y MEGAFAUNA TERRESTRE EXTINTA DEL PLEISTOCENO DE CHILE. Publicación Ocasional del Museo Nacional de Historia Natural, vol. 63, pp. 401-465. (https://publicaciones.mnhn.gob.cl/668/articles-71121_archivo_01.pdf)
Tamayo, M. y Frassinetti, D. (1980). CATALOGOS DE LOS MAMIFEROS FOSILES Y VIVIENTES DE CHILE. Boletín del Museo Nacional de Historia Natural, vol. 37, pp. 323-399. (https://publicaciones.mnhn.gob.cl/668/articles-64209_archivo_01.pdf)
López, P., Rojas, O., Flores-Aqueveque, V., Loyola, R., Martínez, I. y Cartajena I. (2018). El Pleistoceno de la Cuenca de Calama: Evidencias Paleontológicas y Arqueológicas. MONOGRAFÍAS DEL MUSEO DE HISTORIA NATURAL Y CULTURAL DEL DESIERTO DE ATACAMA, N°1. (https://www.researchgate.net/publication/326678114_El_Pleistoceno_de_la_cuenca_de_Calama_Evidencias_paleontologicas_y_arqueologicas)
López,P., Flores, V. y Martínez, I. (2020). Hallazgos de mamíferos extintos del pleistoceno en la cuenca de Santiago (Región Metropolitana, Chile). Observaciones geológicas y taxonómicas. Anales del Museo de Historia Natural de Valparaíso, vol. 33. https://www.researchgate.net/publication/349830335_Hallazgos_de_mamiferos_extintos_del_pleistoceno_en_la_cuenca_de_Santiago_Region_Metropolitana_Chile_Observaciones_geologicas_y_taxonomicas
Castillo, P. (2018). La batalla prehistórica de Huechuraba. Recuperado de: https://www.latercera.com/nacional/noticia/la-batalla-prehistorica-huechuraba/110790/
Casamiquela, R. (1968). Nota sobre restos de desdentados fósiles (Mylodontidae, Scelidotheriinae) de Conchalí, suburbios de Santiago. Academia Chilena de Ciencias Naturale, N° 326, pp. 127-135. (https://www.patrimoniocultural.gob.cl/dinamicas/DocAdjunto_737.pdf)
Arita, H. (2010). El regreso del caballo: lo macro y lo micro en la evolución. Ciencias, N° 97, pp. 46-55. (https://www.redalyc.org/pdf/644/64415000008.pdf)
López, P., Jackson, D. y Jackson, D. (2005). Presencia del género Palaeolama P. Gervais (Artiodactyla, Camelidae) en el extremo meridional del semiárido de Chile (Los Vilos-IV Región). Boletín del Museo Nacional de Historia Natural, vol. 54, pp. 129-140. (https://publicaciones.mnhn.gob.cl/668/articles-64523_archivo_01.pdf)
Canto, J., Yáñez, J. y Rovira, J. (2010). Estado actual del conocimiento de los mamíferos fósiles de Chile. Estudios Geológicos, vol. 66 (N°2), pp. 255-284. https://www.researchgate.net/publication/49607054_Estado_actual_del_conocimiento_de_los_mamiferos_fosiles_de_Chile
Ortuya, M., Alarcón-Muñoz, J. y Mourgues, F. (2018). First finding of a rodent fossil (Rodentia: Ctenomyidae) in Santiago basin, Metropolitan region, Chile. I Congreso Chileno de Paleontología, pp. 308-311. https://vbook.pub/documents/1-congreso-paleontologia-chile-lon73j7m5523